Hace manis y pedis en un salón de belleza de poca monta.

La mayor organización de manis de la que había oído hablar.

Ayer le prendieron fuego al taxi de un colega, durante una de esas manis.

Entonces había manis día sí y día también.

Se turnaban en las sentadas, en las manis.

Siempre vendiendo chapas y haciendo manis y organizando brigadas a Irak para poder contar lo que vemos.

Es uno de esos estudiantes melenudos, de los que va a "manis" y cosas por el estilo.

Ahora nos vemos en los funerales de los amigos que se van muriendo, en las manis, y en cosas de esas.

Durante las manis, dejaban sus folletos homófobos justo al lado de la pila de agua bendita, y los curas hacían la vista gorda.

Al viejo Serafín Ciruela no le gustan los maníes; prefiere los manises.

Y vosotros matasteis a Manis, que también tenía el mismo talento.

A los recuerdos les ocurre como a los manises: hay que tragarlos con algo.

Casi siempre era la pobre Manis la que debía teñírselas.

Elector y arzobispo de Manis, hombre de estado, diplomático y primer patrono de Leibniz.

Ayer llegó la noticia: su patrón murió en Manis.

La masita estaba cubierta de manises quebrados y azúcar.